Etiquetado y denominaciones del vino español

La uva es el tercer cultivo en España, después del cereal y el olivo.
El 15,5% de los viñedos del mundo están en España, lo que hace que España sea el primer país del mundo en cuanto a superficie de viñedo.
Sin embargo, los viñedos españoles tienen un bajo rendimiento (debido al clima seco), por lo que España ocupa el tercer lugar en producción de vino, detrás de Francia e Italia.
Hay viñedos en las 17 comunidades autónomas españolas, desde la húmeda Galicia en el noroeste hasta la seca Murcia en el sureste.
La mayor superficie de viñedos se encuentra en Castilla-La Mancha.
Los viñedos más densamente plantados de España se encuentran en La Rioja, la región vinícola más famosa de España.
El 56,2% del vino español está designado como «vino de calidad» (VCPRD-Vino de Calidad Producido en una Región Determinada).
En 2017, España contaba con más de 90 denominaciones de origen (D.O.)
También hay 42 zonas con vinos designados como Vino de Tierra, que es el siguiente paso hacia abajo de la denominación de origen en términos de calidad.
Las etiquetas de los vinos incluyen a veces palabras como joven, crianza y reserva, entre otras. Estas palabras indican el tiempo de envejecimiento del vino.

A pesar de que la mayor parte del vino español es tinto, el 61,5% de los viñedos españoles son blancos. Esto es importante porque España también produce mucho brandy y jerez y porque España hace algunos vinos blancos excelentes.
Las principales variedades de uva tinta en España son Tempranillo, Bobal, Garnacha y Monastrell.
Las principales variedades de uva blanca son Airén, Macabeo, Palomino y Pedro Ximenez.

La temperatura ideal para servir el vino tinto es de 47 a 56 grados. Esto es contrario al consejo común de beber el vino tinto a temperatura ambiente. El consejo más preciso es beber el vino a temperatura de bodega, que es mucho más fría que la mayoría de las habitaciones modernas.

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